Mediante el
instrumento HARPS-N, el ‘cazador de planetas’, del Telescopio Nazionale Galileo en el
Observatorio Astrofísico del Roque de Los Muchachos (La Palma, Canarias) y el
telescopio espacial Spitzer de la NASA, un equipo
internacional de astrónomos ha descubierto el planeta rocoso más próximo al nuestro fuera del sistema
solar. El hallazgo ha
sido publicado en la revista Astronomy
& Astrophysics.
El planeta en cuestión ha sido bautizado como HD
219134b y se encuentra a unos 21 años luz de distancia, en la Constelación de Casiopea. Los datos de la
investigación revelan que su estrella madre, una enana tipo K, es muy
similar a nuestro Sol pero algo más fría y también un poco más pequeña. Según
los cálculos de los astrónomos su período orbital es de tan solo tres días.
“Es el planeta rocoso más cercano a nosotros que se
ha confirmado, lo que ofrece perspectivas emocionantes para estudiar su
atmósfera en un futuro cercano”, explica Giusi Micela, directora del
Observatorio Astronómico de Palermo del Instituto Nacional de Astrofísica
(INAF) en Italia y coautora del estudio.
El espectrógrafo de alta resolución tiene la
capacidad de medir la velocidad radial de la estrella que alberga un planeta con
una precisión sin igual; gracias al leve ‘balanceo’ que su presencia induce
gravitacionalmente sobre la estrella, se pudo identificar la masa del planeta: cuatro veces y media la masa
terrestre y con una densidad aproximada de 6 gramos por centímetro cúbico. Es una supertierra, pero de menor tamaño que Urano o Neptuno.
“Es un resultado sin precedentes. Es
el exoplaneta rocoso más próximo, con características muy similares a las de la
Tierra. Es un planeta
incandescente, no hospitalario para la vida, pero lo más importante es que cada
vez nos acercamos más a la identificación de un planeta análogo a la Tierra”,
explica Giampaolo Piotto, coautor del estudio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario